El futuro de la logística de última milla: tendencias emergentes para 2025

Digitalización, sostenibilidad y personalización marcan el futuro logístico en 2025. Descubre cómo estas tendencias revolucionan el sector.

La digitalización, la sostenibilidad y la flexibilidad que exigen los consumidores son los principales retos que enfrenta el sector logístico en 2025. Estas áreas no solo buscan mejorar la calidad del servicio, sino también contribuir activamente al cuidado del medioambiente.

El sector logístico sigue en plena transformación, impulsado por la consolidación del eCommerce, los avances tecnológicos y la creciente conciencia sobre sostenibilidad. Según el Panel de Hogares de la CNMC, un 54,1% de los españoles realizó compras online durante el segundo trimestre de 2024, reflejando un cambio significativo en los hábitos de consumo. «La creciente demanda online ha generado un perfil de consumidor cada vez más exigente, obligando al sector a buscar soluciones innovadoras para enfrentar la complejidad operativa actual«, señala Ramón Pérez, Senior Manager National Sales de GLS Spain.

 

3 tendencias de logística de última milla para 2025

En este contexto, tres tendencias destacan como fundamentales para abordar los retos del futuro:

Transformación digital: automatización y cadenas de suministro inteligentes

La incorporación de tecnologías avanzadas como el Big Data, el cloud, el 5G, el Internet de las Cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA) está revolucionando el sector logístico. Estas herramientas permiten mejorar la eficiencia energética, anticipar picos de demanda, tomar decisiones clave y garantizar el bienestar de los trabajadores.

Uno de los mayores avances ha sido la automatización del proceso logístico mediante el uso de robótica y sistemas de gestión (WMS), que optimizan los esfuerzos del equipo humano en actividades estratégicas. GLS Spain, por ejemplo, ha desarrollado soluciones como la escalabilidad predictiva basada en IA, que permite anticipar demandas y optimizar recursos para satisfacer necesidades futuras. Además, utilizan indicadores recopilados por web y apps para supervisar rutas y mejorar la eficiencia operativa.

Herramientas como el IoT también juegan un papel clave al supervisar en tiempo real los inventarios, ajustando los procesos con agilidad y precisión. Esta tecnología, combinada con sistemas basados en la nube, facilita una mayor flexibilidad y control sobre toda la cadena de suministro.

Sostenibilidad: compromiso ambiental como prioridad

Los consumidores son cada vez más conscientes del impacto ambiental en sus decisiones de compra. Según el Observatorio Cetelem de Sostenibilidad y Consumo 2024, un 45% de los consumidores considera los criterios sostenibles al elegir marcas. Este cambio en las prioridades ha llevado al sector logístico a adoptar prácticas más responsables, como la gestión eficiente de residuos, el uso de energías renovables, la electrificación de flotas y la descarbonización de procesos.

Esta creciente concienciación ha llevado a la industria logística a adoptar prácticas más responsables en todos los procesos de la cadena de suministro. Entre estas prácticas destacan: la eficiencia en la gestión de residuos, el uso de energías renovables, la descarbonización, la electrificación de flotas, el empleo de biocombustibles y el diseño de rutas más eficientes para reducir las emisiones.

Otra de las áreas donde más se evidencia este compromiso es la última milla, que en 2025 estará impulsada por un sector cada vez interconectado gracias a la proximidad entre los centros de distribución. Con esta filosofía, nace el concepto de “nearshoring”, que hace referencia al traslado de las operaciones de logística y cadena de suministro a ubicaciones geográficamente más cercanas a los puntos de entrega. Esta reestructuración no solo reduce los costes y los tiempos de entrega de forma significativa, sino que también permite la optimización de recursos y la reducción del tráfico en las arterias principales de las ciudades, consiguiendo así entregas más rápidas y eficientes. 

En este sentido, GLS Spain pone en valor la existencia de su red agencial, que facilita recorridos más cortos y un reparto sostenible. A su vez, agencias de la red de GLS han participado en proyectos como “Reparto Última Milla” en Valencia. Este modelo se basa en utilizar un parking de un centro comercial como punto de distribución logístico. De este modo, los paquetes están más cerca de los destinatarios y los repartos pueden realizarse con bicicletas y otros vehículos eléctricos.

Experiencia del cliente: personalización y soluciones “Out of Home”

El consumidor del futuro no solo espera la entrega de productos. Exige una experiencia de compra completamente personalizada, que responda a sus necesidades y preferencias. En este sentido, la logística de última milla incrementará en 2025 sus opciones de personalización. Entre estas, destacan soluciones como «click&collect», elección de horarios de entrega, ubicaciones específicas y el uso de lockers inteligentes.

En este contexto, GLS Spain está ampliando su red de soluciones “Out of Home” con 6.900 Parcel Shops y Parcel Lockers ubicados en puntos estratégicos de las ciudades. Estas taquillas, disponibles 24/7, permiten a los clientes recoger sus paquetes de forma segura y cómoda. Además, herramientas como MyGLS ofrecen seguimiento en tiempo real, permitiendo al usuario conocer el estado de su envío o modificar la dirección de entrega según sus necesidades.

A pesar de que estas tendencias no son nuevas, su adopción sigue siendo desigual en el sector. GLS Spain se posiciona como un líder en la implementación de soluciones tecnológicas, sostenibles y orientadas al cliente. Marca el camino hacia un futuro logístico más eficiente y responsable.